4/5/10

Más listo que el hambre

Conocedor como nadie de lo que aquí se cuece, yanguas ha hecho un brillante análisis, no exento de autocrítica, acerca de la situación económica y social del municipio. Entrevistado por una brillante reportera, el alcalde ha expuesto su opinión sobre diversos asuntos que a todos nos preocupan.

Es verdad que leyendo el texto original de la entrevista da la impresión de que parte de sus comentarios van dirigidos a otros partidos y a otras administraciones, pero detrás de todo se esconde un análisis certero y duro sobre nuestra propia realidad.

Dice, por ejemplo, que ‘el país tiene un déficit brutal, lo que quiere decir que el Gobierno está gastando mucho más de lo que ingresa y quiere decir que estamos endeudándonos y poniendo en peligro el futuro, porque esa deuda hay que pagarla’. Tras esa rotunda frase yanguas nos está contando la difícil situación económica por la que atraviesan las arcas municipales. Ha dicho país porque ama almuñécar como si fuera su patria. Esa es la razón.

En otro momento de la entrevista, dice que ‘llevamos con los impuestos congelados desde los años noventa, fecha desde la que en Almuñécar no se suben impuestos, muy al contrario se han bajado algunos impuestos y algunas tasas y somos unos de los municipios que tenemos una presión fiscal de las más bajas de la provincia de Granada.’ Esto parece ser una fantasía. Otra explicación no le he encontrado.

Buen conocedor del paño, como funcionario ejemplar, primero de médico, luego de consejero de la tele andaluza y en otros doce años como alcalde, afirma que ‘En este país hace falta adelgazar el número de funcionarios porque al final resulta que un trabajador debe trabajar para un pensionista, para un parado y tiene que trabajar para un funcionario público.’ De ahí su gran empeño en privatizar todos los servicios. Es verdad que al final salen hasta más caros en algunos casos, pero eso es otro debate.

Parecía hablar de otro partido, pero pronto me di cuenta de que lo que yanguas hacía era desahogarse. Agobiado como está por las numerosas peticiones que le llegan del partido verdiblanco, afirma que ‘La red clientelar es tan tremenda, no solo de cargos públicos y funcionarios sino también a través de toda la red de empresas que han generado fuera de todo control económico y parlamentario, que es para echarse las manos a la cabeza al ver el lastre que esto supone porque se tragan la mayor parte de los presupuestos y de los impuestos que pagamos los ciudadanos.’. Quién mejor que él para conocer el tema si ha tenido que contratar hasta a su señora para evitar problemas en casa. En el fondo, es un hombre desbordado por las circunstancias y esta denuncia que lanza en la entrevista no debería caer en saco roto. Dejen ya de agobiar al alcalde, militantes de convergencia que sólo aspiran a un cargo, a un sueldo o a una contrata. Déjenlo llevar adelante su política de austeridad porque si no llegará el día en que tenga problemas hasta para pagar su propio sueldo, no por modesto menos importante.

También le preocupa, no podía ser de otra forma, el bajo nivel político de muchos de sus compañeros de partido y corporación. Incluso tiene que hacer de portavoz en los plenos llegando al extremo de cambiar el voto en treinta segundos en vista de la pasividad de sus concejales que ni hablan ni se enteran. Está preocupado por eso, pero le da regomello decirlo en público, así que ha preferido hablar en parábolas, como el otro que mataron allí en lo alto del monte para que la gente pudiera bailar sevillanas y comer habas con bacalao en cualquier plaza a principios de mayo. Y así, mediante una parábola, como si hablara de otro partido, ha declarado: ‘Por lo que yo conozco, el nivel es flojito. El PSOE ha tenido la habilidad de conservarse permanentemente en el poder, no con el gobierno de los mejores, sino encumbrando a los mediocres, y salvo muy contadas excepciones, y uno lo nota cuando tiene relaciones institucionales con ellos, es que están flojitos, flojitos. Sería bueno que alguna vez, al frente de la administraciones estuvieran los mejores y más cualificados, no los más dóciles y obedientes.’.

Y fuera de almuñécar la vida sigue y parece que con cambios importantes. Uno, rajoy se reúne con zapatero. Dos, los carmelitas sin zapatos denuncian a un colega al que gustaba encerrarse con el monaguillo en la celda y no era para ver la tele. Tres, las gambas congeladas valdrán para esta navidad a dos euros el kilo. No te dirán que tienen petróleo pero ya te lo puedes imaginar. Eso contribuirá de forma importante a bajar el hípese, así que no es tan mala noticia esa del pozo que se ha roto. Cuatro, en cambio, la leche de cabra subirá de precio porque parece que va de puta madre para algo que no me he enterado muy bien pero que lo cuentan en los periódicos en esa página que nadie lee.

Salud

No hay comentarios:

Publicar un comentario